La idea se le ocurrió a Jason Burke, médico diplomado y anestesista, que trabajaba en la ciudad de Las Vegas (EEUU). Durante su trabajo en el hospital, había asistido en muchas ocasiones a pacientes con resaca severa. Se trataba mayoritariamente de turistas que habían llegado a las Vegas para pasar varios días de fiesta y a los que la resaca les arruinaba varios días de estancia.
Jason vio una oportunidad de negocio en el tratamiento de la resaca mediante un equipo médico móvil. Por ese motivo, ideó el HangoverHeaven. Se trata de un autobús que dispone del equipamiento típico de una ambulancia: hay tubos para suero, personal sanitario, pulsímetros y literas.
Los clientes que sufren de resaca, pueden llamar al servicio que se presenta en la puerta del hotel en menos de 1 hora. Dentro del autobús, el tratamiento dura alrededor de 45 minutos y dispone de dos posibles paquetes: “Redención”, con un coste de 85 €, que consiste en solución salina intravenosa, vitamina B y C y “Salvación”, que por 140 € incluye fármacos contra las náuseas y anti-inflamatorios.
No admiten el tratamientos a personas con complicaciones médicas, que hayan estado bebiendo dos horas antes de la visita o a embarazadas.
Fuente: http://rastreadordenoticias.com
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